Dependiendo del grado de doblez puede considerarse un componente reemplazable o no.
Debido a los procesos de inyección y a los materiales plásticos utilizados en su fabricación, las miniaturas pueden presentar ciertas dobleces (sobre todo en partes finas y alargadas). En la gran mayoría de los casos, estas dobleces pueden repararse de manera sencilla aplicando un poco de presión con los dedos y habiendo calentado previamente la miniatura (con ayuda de un secador o agua caliente). Tras darle la forma deseada, se deberá dejar enfriar la miniatura para que permanezca en la nueva postura. Si aun así, la miniatura no lograra mantenerse en la posición deseada, en la mayoría de las veces esto no afectaría a la jugabilidad y por tanto no sería motivo de reemplazo.
Si por el contrario la deformación de la miniatura es tan grave que afecta a la jugabilidad, puedes rellenar el siguiente formulario y atenderemos tu incidencia lo antes posible.